divendres, de desembre 14, 2007

Dando abrazos libremente


Este viernes probé (junto con un montón de Couchsurfers) esto de los abrazos gratis, y fue una experiencia bien interesante.
Puede uno experimentar muchas cosas. Es una actividad que a nadie deja indiferente. A quienes les gusta la idea, tienen una sonrisa de oreja a oreja antes y/o después del abrazo. A quienes no les gusta, su amargura se acentúa y miran con una cara que quita las ganas de cualquier cosa, no ya abrazarles, sino incluso mirarles.
Disfruté mucho algunos abrazos (para los básicos de mente decirles que no fueron los dados a las chicas más guapasssss! pues ahora estoy "trascendental" jajaja). Recuerdo el que dimos yo y otro chico a un señor muy solo, otro a una señora que miraba y miraba, como con curiosidad, y sí cuando abrí mis brazos vino en seguida hacia mí encantada de recibir un abrazo ella también!



El otro día pensaba que en esta sociedad somos demasiado distantes. Estando aquí inmersos en esta forma de vida, en este ritmo de vida, no nos damos cuenta o no lo vamos a admitir. Pensamos que nos une el fútbol (cantando el himno del Barça) pero eso no es nada comparado con lo que puede unir un abracito. Pero no quiero empezar otra vez a meterme con el fútbol, cada uno que haga lo que quiera, yo espero volver a salir por ahí a hacer el 'tonto sentimental'. Y por cierto quiero estas Navidades dar un abrazo a mi familia y amigos, pues con los más cercanos también hay que hacerlo, por lo menos intentar no caer, como tantas veces habré hecho ya, en el error de no valorar las cosas que uno tiene hasta que las pierde, esta vez en cuanto a cariño que puede uno dar y recibir.
Un pintor de los que estan en Drassanes, al final de la Rambla ya llegando a Colón, me decía que no deberíamos llamarlo "Abrazos gratis", pues todos los abrazos son gratis. Quizá tenga razón, y podría ser mejor "Abrazos libres" o "¿Quieres un abrazo?". Pero por otra parte me gusta llamarlo "gratis" porque así recordamos que es algo que hacemos a cambio de nada material, y demostramos que no todo en este mundo tiene un precio. Un abrazo no se compra, un abrazo se da y se recibe, o no. Nada más.

La meva foto
Nom:
Ubicació: Barcelona, Spain